A la espera de un Salvador: El evangelio, la nueva creación, y el fin de la pobreza
AARON ARMSTRONG
Los cristianos están llamados a servir a los pobres... de manera generosa, alegre, por gracia, para la gloria de Dios. Pero la eliminación de la pobreza es un objetivo errado y peligroso. La pobreza está arraigada en la caída del ser humano, y solo hay un Salvador.
«Aaron Armstrong no solo ha pensado arduamente acerca de la mitigación de la pobreza, sino que ha trabajado arduamente en ello. En consecuencia, es acertadamente pesimista respecto a las soluciones humanistas, es animadamente optimista respecto a la solución última de Dios, y es realista práctico respecto a lo mejor y lo máximo que la Iglesia puede hacer en esta era presente».
Dr. David P. Murray, profesor, Seminario Teológico Reformado Puritano; presidente de HeadHeartHand Media